Pueden haber muchos otros, más altos, más bajos, más gorditos, más flacos, rubios, morenos, con pecas, sin pecas, con risas escandalosas, silenciosas, más buenos, más malos, de cualquier tipo, pero ninguno será él...

Siempre he dicho que cambian las cosas, no los sentimientos.

Y desde el primer momento en el que lo vi caer, algo dentro de mi se desgarró, es como si el primer golpe me hubiese ido directo dentro, los escalofríos no cesaban, y la falta de aire cada vez era más constante. Recuerdo como una incesante lluvia generada en mis pupilas recorrían mi cara, como tras haber averiguado donde estaba tiré el vaso de agua y comencé a correr. Corría mientras notaba como aún algunas gotitas frías me resbalaban, la carrera me trajo serenidad, conseguí dejar de llorar. Finalmente, el verlo me tranquilizó mucho más, y para ser sincera, comprendí que me importa más de lo que creía.

Cuando duele tanto como dientes en el alma.

Siente dolor, rabia, tristeza, impotencia, siente angustia, escalofríos que recorren su cuerpo, siente como golpes no físicos sino directamente internos se clavan dentro y cada instante duele un poco más. No tiene hambre, pero se ve obligada a comer, cada bocado duele, cada movimiento de inspiración que realiza su organismo es como un puñal. Se ha perdido, no se encuentra, solo sabe que le está doliendo muchísimo y dejando sin fuerzas ninguna...

Quizás esa persona no lo sepa, ni se haga una mínima idea de que yo lo se, pero desde un principio me parecía una persona fuerte, con una historia detrás por la que había salido adelante y los golpes que a veces nos da la vida la habían hecho fuerte, he admirado su templanza, su agresividad con la vida y la manera que tiene para luchar por lo que quiere. Mis amigos al escucharme decir esto opinan que estoy loca, y aseguro que no, estoy muy segura de lo que digo, y la admiro, porque es fuerte tras haber sufrido y luchado muchísimo durante tiempo, mientras yo en cambio, con lo más mínimo me vengo abajo y me ahogo como si se tratase de un vaso de agua...

No quieras con palabras, quiere con hechos.

Y es así, el tiempo me ha demostrado que las palabras se las lleva el viento, que aunque queden muy bonitas si no demuestras cada cosa es como si nunca hubiesen salido de tu boca, por eso como me dijeron una vez:
-¿De qué sirven las palabras sin hechos?
-De nada
-De nada,exacto. Son meros instrumentos que se utilizan para conseguir lo que igualmente se haría con un hecho.

Carnaval de sentimientos.

Esta noche, dime que me quieres.
Cada vez que conoces a alguien tu vida cambia y,
tanto si te gusta como si no, nosotros nos hemos encontrado,
 yo he entrado en tu vida y tú en la mía. 

Happy Birthday.

¿Qué puedo decirte que ya no te haya dicho ya en este día?
Son dieciocho años  ya, los tan deseados, ansiados, por todos menos para ti que te levantarás con canas, te empezaran los dolores de cabeza continuos y no precisamente  por la resaca...Pero bueno, mientras te duele la cabeza, yo intentaré hacerte feliz los trecientos sesenta y cinco días que faltan para que llegues a los diecinueve. Intentaré que te siga doliendo la barriga de tanto reír, que te tropieces treinta mil veces y en todas ellas sea por "palabra cierta", que los días más malos a mi lado se hagan menos pesados, y los buenos se conviertan en maravillosos, que las lágrimas queden guardadas una a una en un cajón para reunirlas una tarde y con la excusa de una película soltarlas todas, quiero que seas feliz, y ¿sabes por qué? Porque te lo mereces y ya viene siendo hora. Felices dieciocho preciosi<3

Tell me a lie

-And well, there must 've been a time I was a reason for that smile so keep in mind.

Dueña por primera vez de su destino.

Llevaba la maleta de la ropa para quedarse y otra maleta igual con casi dos mil cartas ordenadas por fechas, en paquetes cosidos con cintas de colores, y todas sin abrir...

¿Alguna vez en tu vida has tenido una gran historia de amor?

No un amor de ir de bares, o de ir por ahí de excursión, un amor de los que se te agarra aquí y parece que no puedes respirar...Pues yo, sí.

-Si me pierdo, encuéntrame, si te pierdes, yo contigo. Porque lo que tu y yo hemos vivido no son cadenas, ni si quiera lazos, es el sueño de cualquier amigo, es pintar un te quiero a trozos. Si dudo, me empujas, si dudas te entiendo. Si me dejas mantendré viva la llama. Porque el amor es como Don Quijote: Solo recobra la cordura para morir.

Definitivamente, los 14 de febrero, esté sola o acompañada, me siguen pareciendo algo idiota.

Anoche no se lo que pasó, estaba intentando concentrarme para el examen que tenía hoy mismo, pero no podía, así que cansada cerré todo para ir a acostarme. Mañana será otro día, pensé, pero como no, se me calló la carpeta y dio la casualidad que se me abrió por la parte donde escribo todo lo que no me atrevo a decir, o incluso lo que escribo aquí. Al empezar a leer, recordé todas y cada una de las sensaciones que sentí mientras las escribía. Y cada palabra funcionaba como un puñal que me atravesaba, me costaba y me sigue costando entender como pueden cambiar las cosas tan sumamente rápido...

Dime que es verdad, que no es un sueño ni nada.

Quizás me puedo volver un poco loca, supersticiosa, pero hay algo de razón en lo que dicen 

que si sueñas con esa persona es porque esa persona se durmió pensando en ti.

Voy a cambiar mi suerte.

No voy a perder ni un minuto más de mi tiempo, esta idiota se va, voy a cambiar mi suerte. Si quieres puedes venir, sino, no te voy a obligar ni a rogar.

Vas por ahí gritando que pasas de todo,

únicamente porque es más fácil que tener sentimientos.

Sorpréndeme con un beso.

-Necesito que lo hagas de verdad.

Tengo miedo, mucho miedo, la situación esta perdiendo el mínimo de control que la sostenía, me puede, la situación me puede, no puedo sonreír, estoy cansada. Así que ya no hay más, voy a llorar y llorar, lo que a mí me de la gana, lo que me apetezca y lo que crea necesario, se que no servirá de nada, pero sonreír y hacer como que tampoco pasa nada, sirve aún de muchísimo menos.